En lo que va corrido del 2008 se han registrado cuatro atentados con granadas y petardos de bajo poder. Hace tres semanas, el CTI halló una tonelada de explosivos en una alberca comunal
El hallazgo de la tonelada de anfo a unos 800 metros de la planta de almacenamiento de combustible Ayatawacoop, mantuvo en alerta por más de 24 horas a los moradores de tres barrios de Maicao, que tuvieron que evacuar sus viviendas y dormir en albergues temporales hasta que expertos antiexplosivos del grupo Marte del Ejército, con apoyo del DAS y el CTI, lograron desactivar la carga de manera controlada.
El poderoso explosivo fue encontrado por personal del CTI, en la tarde del pasado 29 de julio, precisamente el mismo día que una granada estalló dentro de una agencia de transporte marítimo, en la carrera 11 entre calles 14 y 15, luego de ser lanzada por un hombre que se movilizaba en una motocicleta.
En los últimos ocho meses, en Maicao se han registrado cuatro ataques con granadas y petardos de bajo poder, según datos de la Policía.
Esto, sumado a la ola de atracos y homicidios selectivos, han generado una alta preocupación por la seguridad en el municipio fronterizo, a tal punto que el presidente del Concejo, Hugo Montalvo, convocó el viernes pasado a los representantes de la Fuerza Pública para analizar la situación de orden público y buscar los correctivos para que retorne la tranquilidad.
El comandante de la Décima Brigada Blindada del Ejército, coronel Iván Pineda Recuero, reveló tras ser desactivada la carga de anfo que este material presuntamente iba a ser usado por el frente 59 de las Farc para atentar contra la infraestructura vial, energética y minera de La Guajira.
A esta guerrilla ya le habían atribuido, en mayo pasado, la voladura de cinco torres de energía de ISA en La Majayura, corregimiento de Maicao; el descarrilamiento de 41 vagones del tren del Cerrejón en la vía a Uribia, y la quema de tres tractomulas que transportaban carbón en zona rural de Riohacha.
Una fuente del Das le dijo a este diario que milicianos de las Farc, que hace más de una década fueron desplazados por las Autodefensas del sector de Carraipía, en zona rural de Maicao, están tratando de recuperar este territorio y que con estos actos terroristas quieren demostrar su poder.
Señaló, además, que los ataques en contra de algunos establecimientos comerciales tendrían que ver con bandas delincuenciales, integradas por desmovilizados de las Auc, que se están reorganizando para controlar el negocio del narcotráfico.
Maicao se ha convertido en el centro de acopio de la droga que sacan por los puertos de la Alta Guajira con destino a los mercados internacionales.
Al margen de esto la recesión económica que atraviesa el municipio debido a las restricciones del Gobierno al ingreso de mercancía por la Zona de Régimen Especial Aduanero y a los problemas fronterizos con Venezuela, también ha incidido en el aumento de delitos como el hurto, sobre todo en la zona comercial.
Un ejemplo de ello fue el robo millonario cometido el pasado 28 de junio en el banco BBVA.
Tres hombres fuertemente armados ingresaron, a las 2:10 de la tarde cuando apenas acaban de abrir la entidad bancaria, llevándose más de 200 millones de pesos
Este hecho coincidió con el estallido de un artefacto explosivo de bajo poder en la subestación de Electricaribe, ubicada en la vía que comunica con el corregimiento de Carraipía, que dejó al municipio por casi 18 horas sin el servicio de energía.
Oscar Ortega, administrador de un local de licores, aseguró que han tenido que doblar la vigilancia en su negocio para evitar ser víctima de los hurtos.
"Cada vez que vamos a hacer una consignación llevamos hasta cuatro vigilantes para que nos acompañen al banco.
Hace como tres días a la vuelta de aquí le quitaron a un señor 13 millones de pesos", contó Ortega. La mayoría de estos atracos son cometidos por delincuentes que se movilizan en motocicletas. Por la ciudad circulan unas 3.000.
Medidas de seguridad
Para frenar la inseguridad el alcalde (e) Jarlen Garrido expidió el pasado primero de agosto un decreto en el que se restringe la circulación de motocicletas por el centro (desde la carrera 9 hasta la carrera 13, de la calle 10 a la calle 16 y de la carrera 8 a la 22 con calle 16) y prohíbe su circulación por toda la ciudad el 20 de cada mes. Tampoco podrán transitar por el perímetro urbano entre las 10 de la noche y las 5 de la mañana.
Asimismo, la Policía aumentó su personal con 30 hombres de la Fuerza de Control Urbano (Fucur) y 40 más que están en comisión para garantizar la seguridad en el municipio fronterizo.
En total son 140 agentes que están ejerciendo control en lo que respecta al porte de armas y al transporte en motocicletas.
Por estos días es común ver a la entrada de los bancos hasta tres policías y a las patrullas pasando revista por la zona comercial.
Sin embargo, algunos comerciantes se quejan de que las autoridades están más pendientes de decomisarles la mercancía que de su seguridad.
PAOLA BENJUMEA BRITTO
Especial para EL TIEMPO
MAICAO (LA GUAJIRA)
El hallazgo de la tonelada de anfo a unos 800 metros de la planta de almacenamiento de combustible Ayatawacoop, mantuvo en alerta por más de 24 horas a los moradores de tres barrios de Maicao, que tuvieron que evacuar sus viviendas y dormir en albergues temporales hasta que expertos antiexplosivos del grupo Marte del Ejército, con apoyo del DAS y el CTI, lograron desactivar la carga de manera controlada.
El poderoso explosivo fue encontrado por personal del CTI, en la tarde del pasado 29 de julio, precisamente el mismo día que una granada estalló dentro de una agencia de transporte marítimo, en la carrera 11 entre calles 14 y 15, luego de ser lanzada por un hombre que se movilizaba en una motocicleta.
En los últimos ocho meses, en Maicao se han registrado cuatro ataques con granadas y petardos de bajo poder, según datos de la Policía.
Esto, sumado a la ola de atracos y homicidios selectivos, han generado una alta preocupación por la seguridad en el municipio fronterizo, a tal punto que el presidente del Concejo, Hugo Montalvo, convocó el viernes pasado a los representantes de la Fuerza Pública para analizar la situación de orden público y buscar los correctivos para que retorne la tranquilidad.
El comandante de la Décima Brigada Blindada del Ejército, coronel Iván Pineda Recuero, reveló tras ser desactivada la carga de anfo que este material presuntamente iba a ser usado por el frente 59 de las Farc para atentar contra la infraestructura vial, energética y minera de La Guajira.
A esta guerrilla ya le habían atribuido, en mayo pasado, la voladura de cinco torres de energía de ISA en La Majayura, corregimiento de Maicao; el descarrilamiento de 41 vagones del tren del Cerrejón en la vía a Uribia, y la quema de tres tractomulas que transportaban carbón en zona rural de Riohacha.
Una fuente del Das le dijo a este diario que milicianos de las Farc, que hace más de una década fueron desplazados por las Autodefensas del sector de Carraipía, en zona rural de Maicao, están tratando de recuperar este territorio y que con estos actos terroristas quieren demostrar su poder.
Señaló, además, que los ataques en contra de algunos establecimientos comerciales tendrían que ver con bandas delincuenciales, integradas por desmovilizados de las Auc, que se están reorganizando para controlar el negocio del narcotráfico.
Maicao se ha convertido en el centro de acopio de la droga que sacan por los puertos de la Alta Guajira con destino a los mercados internacionales.
Al margen de esto la recesión económica que atraviesa el municipio debido a las restricciones del Gobierno al ingreso de mercancía por la Zona de Régimen Especial Aduanero y a los problemas fronterizos con Venezuela, también ha incidido en el aumento de delitos como el hurto, sobre todo en la zona comercial.
Un ejemplo de ello fue el robo millonario cometido el pasado 28 de junio en el banco BBVA.
Tres hombres fuertemente armados ingresaron, a las 2:10 de la tarde cuando apenas acaban de abrir la entidad bancaria, llevándose más de 200 millones de pesos
Este hecho coincidió con el estallido de un artefacto explosivo de bajo poder en la subestación de Electricaribe, ubicada en la vía que comunica con el corregimiento de Carraipía, que dejó al municipio por casi 18 horas sin el servicio de energía.
Oscar Ortega, administrador de un local de licores, aseguró que han tenido que doblar la vigilancia en su negocio para evitar ser víctima de los hurtos.
"Cada vez que vamos a hacer una consignación llevamos hasta cuatro vigilantes para que nos acompañen al banco.
Hace como tres días a la vuelta de aquí le quitaron a un señor 13 millones de pesos", contó Ortega. La mayoría de estos atracos son cometidos por delincuentes que se movilizan en motocicletas. Por la ciudad circulan unas 3.000.
Medidas de seguridad
Para frenar la inseguridad el alcalde (e) Jarlen Garrido expidió el pasado primero de agosto un decreto en el que se restringe la circulación de motocicletas por el centro (desde la carrera 9 hasta la carrera 13, de la calle 10 a la calle 16 y de la carrera 8 a la 22 con calle 16) y prohíbe su circulación por toda la ciudad el 20 de cada mes. Tampoco podrán transitar por el perímetro urbano entre las 10 de la noche y las 5 de la mañana.
Asimismo, la Policía aumentó su personal con 30 hombres de la Fuerza de Control Urbano (Fucur) y 40 más que están en comisión para garantizar la seguridad en el municipio fronterizo.
En total son 140 agentes que están ejerciendo control en lo que respecta al porte de armas y al transporte en motocicletas.
Por estos días es común ver a la entrada de los bancos hasta tres policías y a las patrullas pasando revista por la zona comercial.
Sin embargo, algunos comerciantes se quejan de que las autoridades están más pendientes de decomisarles la mercancía que de su seguridad.
PAOLA BENJUMEA BRITTO
Especial para EL TIEMPO
MAICAO (LA GUAJIRA)
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