Por: Colectivo Wainpirai
Cuentan
nuestros ancianos que en los principios del tiempo y de la vida, Ma’leiwa
moldeó con arcilla a una mujer llamada Wolunka, una joven hermosa que tenía
dientes en la vagina. Los hombres enamorados no podían tener relaciones
sexuales con ella por el temor de que sus penes fuesen cortados.
Los
muchachos ya tenían todo planeado para tumbarle los dientes a la vagina de
Wolunka. Estando en la laguna, Ma’yüi dijo que tenía mucho frío y salió del
agua mientras Wolunka jugaba feliz y entretenida con Ulapiui. Ma’yüi buscó las
flechas y con un hueso de cacho de venado elaboró una pequeña pieza con forma
de pene, esperó el momento en que ella saliera del agua, cuando la joven se
recostó sobre la piedra al borde del arroyo abrió las piernas, su primo disparó
directo a la vagina, acertando su tiro.
Simiriu
escuchó el ensordecedor de grito de dolor de Wolunka, los dientes cayeron y uno
a uno se convirtieron en rocas, Wotkasainru’u se tiñó de rojo y las aves
empezaron a llegar y zambullirse en el agua, siendo los primeros el cardenal y
sangre’e toro, llegaron todas las aves de la Guajira, el último fue el colibrí,
por ello su plumaje es tornasol, un resultado de la mezcla de colores.
Su
padre, muy enfadado por esto, hizo llover fuertemente sobre la tierra, los
mellizos tuvieron que huir y esconderse en unas cuevas. Pasados los días y
desesperados por el encierro y la incertidumbre, los jóvenes pidieron ayuda a
las aves, muchos intentaron abrir las piedras pero no podían, hasta que el
pájaro carpintero logró hacer un orificio por donde salió Ulapiui, mientras
tanto, Ma’yüi no quiso salir, estaba poseído por un espíritu maligno que le carcomía
la piel, su sangre se fue convirtiendo en cornalinas mientras caían al suelo
gota a gota.
Cuentan
que, desde aquel suceso, las mujeres y hombres pueden tener relaciones sexuales,
que el hueso con que Ma’yüi disparó a Wolunka, se incrusto en la vagina y es lo
que hoy llamamos clítoris. En nuestros días, pueden verse las manchas de sangre
de Wolunka en Wotkasainru’u, Alta Guajira.
Nota de redacción: En espacios de formación de la Fuerza de Mujeres Wayuu, se realizó el análisis de que podría considerarse este hecho el primer caso de Violencia Basado en Género que sufrió la mujer según la cosmovisión del pueblo wayuu, una falta grave por la cual los malvados Ma'yüi y Ulapiui fueron castigados por el padre Simiriu, la sangre de Ma'yüi convertida en cornalinas es hoy en día un medio de compensación para las faltas de sangre.
Pss esta bien q lo publiquen en NotiWayyu.blogspot.con Si super vamos comentemos ☺🤗
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